Este blog no sería mío, ni estuviera completo si no mencionara otro de mis temas favoritos. LOST, y que mejor ocasión que en la víspera del entreno de la premiere de la sexta y última temporada para abordarlo.
Resumir de que se trata la serie Lost, resulta prácticamente imposible, sin temor a ser tachado de ridículo y de ver la serie más inverosímil que exista, basta mencionar que en una isla, aparentemente desierta, aparezcan osos polares, humos negros asesinos, saltos del tiempo y muertos que resucitan. Y lo más extraño de todo, es que cuando te toca ser espectador, la magia de esta historia te atrapa de tal manera que no te parece ridículo, todo lo contrario, porque no solo comprendes lo que sucede sino que lo justificas, enredándote capitulo con capitulo con las historias que suceden dentro y fuera de la isla. Con los pasados, los presentes, y tal vez hasta con el futuro de cada uno de los personajes que se vuelven místicos, entrelazando sus destinos unos con otros.
Y es que llevar la secuencia correcta de los acontecimientos en la isla donde un grupo de pasajeros de un avión que colapsó viven las aventuras más extremas jamás imaginadas, es tan complejo como contar la historia de manera verbal desde el principio. Ese ha sido parte de del éxito de Lost y que la serie no sea un show más de la abc. Sin lugar a dudas quedara grabada en la mente de quienes la hemos visto como una intrigante historia de culto llena de conexiones, secretos y misterios tan perfectamente diseñados que es difícil de creer como a alguien se le puede ocurrir algo así. Con todo el contenido que va de izquierda a derecha y de arriba para abajo en un santiamén.
Una historia lo suficientemente compleja como para mantener la atención y las expectativa ante misterios y secretos. Pero ¿Que es realmente lo que ha hecho de esta serie lo que ahora se ha convertido? En una adicción, en un culto, casi en una religión, que una mente enferma puede lograr que mentes enfermas como la mía, estemos casi en estado hipnótico cada vez que sale un nuevo episodio y es que pestañear podría significar perder la secuencia de los hechos, de los secretos y de los misterios.
En ésta su última temporada quizas se resuelvan todos los misterios, quizas no, quizas tengamos más preguntas aún que respuestas. Son muchos los enigmas que quedan por resolverse, o quizas simplemente terminamos donde empezamos, lo cierto es que no dejaría de ver esta temporada ni por todo el oro del mundo.
Definitivamente para poder disfrutar una de las series más exitosas en décadas, debes tomarte el tiempo de ver desde la primera temporada, saborearla como los vinos, poco a poco, y quizas en repetidas ocasiones.
En definitiva, Lost quedara en la mente de todos los que la hemos visto, no solo por el hecho de que revoluciono las series de televisión, sino porque logró crear una extraña y enferma religión creada por miles de fans en el mundo.
Sé que sentiré nostalgia cuando termine, sé que quedará un vacio que ni Flashforward (la nombrada sustítuta) llenará, pero al mismo tiempo es un gusto que a pesar de que Lost genera millones de dólares, termine en su momento más alto como debe de ser y no se vuelva solo un producto para generar dinero. Los autores de la serie han pregonado que el final de la serie lo tenían en mente desde la primera temporada, si eso es o no cierto, solo lo sabremos hasta ver el ultimo episodio de ésta su última temporada. De igual manera e indudablemente, quedará en los anales de la televisión como una de las mejores series en la historia.
1 comentario:
Simplemente genial y sabia todo lo q es lost te engancha
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